El coronavirus: debemos actuar ya
El coronavirus pareciera no ser tan terrible. Cerca del 80% de las personas infectadas tienen síntomas menores, en tanto que la tasa de mortalidad es de alrededor del 3%, o menos. Sin embargo, ha causado una gran conmoción en China, y ahora en Europa. La razón es que los sistemas de salud se han visto rebasados. No hay suficientes unidades de cuidados intensivos para atender a todos los enfermos graves, y en lugares como Italia (con más de 20,000 casos confirmados hoy en día) o España (con cerca de 8,000 casos) hay personas que están muriendo sin atención médica alguna.
¿Por qué ha sucedido lo anterior? Una de las razones es que se trata de una enfermedad altamente contagiosa. Se estima que, en las primeras fases de la epidemia, el tiempo en el que se duplica el número de personas contagiadas está entre 2 y 3.5 días (http://dx.doi.org/10.1016/j.ijid.2020.01.050). Pero esta no es la única razón. Los países afectados hasta ahora han aplicado los protocolos que han funcionado con otras enfermedades igualmente contagiosas, pero sin éxito. Al parecer, la explicación radica en el hecho de las personas infectadas son contagiosas aún antes de presentar síntomas.
De acuerdo con los datos de la epidemia en China (https://medium.com/@tomaspueyo/coronavirus-act-today-or-people-will-die-f4d3d9cd99ca) hay un desfase de alrededor de 10 días entre el momento en que una persona es contagiosa y el momento en el que se le diagnostica. Lo anterior significa que el número de casos reportados en una fecha dada, en realidad refleja el número de personas contagiosas que había 10 días atrás. Y que hay una gran cantidad de portadores del virus, que contagiarán a otras personas por 10 días, hasta que acudan al médico y se les diagnostique.
Hoy en México se reportan 53 casos. Según la discusión anterior, esto significa que ese era el número de portadores hace 10 días. Si tomamos en cuenta que el tiempo de duplicación varía entre 2 y 3.5 días, el número real de portadores es de al menos 390, pero puede ser tan grande como 1750. De acuerdo con los protocolos de la Organización Mundial de la Salud, estamos en la fase uno, pues no llegamos a los cien casos y no hay evidencia de contagios domésticos. La fase uno es de alerta. En la fase 2, se recomienda implementar medidas sanitarias y evitar la aglomeración de personas. La fase 3, que consiste en que las personas permanezcan en cuarentena en casa, se aplica cuando el número de casos es del orden de miles.
El Secretario de Salud anunció en días pasados que (según el número de casos confirmados) estamos en la transición a la fase 2. Sin embargo, podemos ver que, si tomamos en cuenta el número de casos reales estimados, debería de estarse implementando la fase 3. Si esperamos a que el número de casos confirmados llegue a mil (entre 9 y 16 días a partir de hoy), el número de casos reales será de al menos 9,500, pero puede llegar a ser 40,000. Estos números son suficientes para saturar nuestros hospitales. Italia y España, que tienen 3 veces más camas de hospital per cápita que nosotros, se han visto rebasados con números similares.
En conclusión, estamos en la inmejorable posición de aprender de la experiencia de China y Europa, y actuar en consecuencia. Debemos de aislarnos en nuestras casas por varias semanas, a partir de ahora. De no hacerlo, el país puede sufrir consecuencias sociales y económicas muy graves. Países como Singapur y Hong Kong implementaron una cuarentena temprana, y el número de casos no rebasa los 300 en ninguno de ellos. Debemos de actuar ya.